Periodistas porristas de Xóchitl Gálvez ignoran su talante arbitrario y actos de corrupción
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Periodistas porristas de Xóchitl Gálvez ignoran su talante arbitrario y actos de corrupción

Gerardo Israel Montes

Xóchitl Gálvez no es la outsider que ha surgido de las entrañas ciudadanas y que se ha impuesto a las élites partidistas, arrebatándoles la postulación de la candidatura presidencial desde donde hacer frente al «populismo» y «autoritarismo» que, según la derecha panista y los tecnócratas priistas, representa Andrés Manuel López Obrador y el partido que fundó.

A pesar de la narrativa política y mediática que busca posicionarla como una candidata ciudadana, la realidad es que Gálvez ha transitado con la clase política más reaccionaria y neoliberal que está a favor de la disminución de las potestades del Estado y los derechos sociales, y en pro de los negocios empresariales a costa de los recursos y bienes públicos.

Una prueba de su acercamiento con la clase política a la que dice no pertenecer, pero con la cual se regodea para poder continuar cerca de esa élite de políticos corruptos que gustan de hacer negocios al amparo del poder público, se dio a mediados de 2016 cuando asistió a la fiesta de cumpleaños del panista Diego Fernández de Cevallos, el “Jefe Diego”, como ella misma lo reverenció durante aquella famosa grabación que la entonces delegada de Miguel Hidalgo realizó con Periscope, el 12 de marzo de 2016.

En aquella ocasión, con su característica superficialidad y al ritmo de “saluden a Periscope”, hizo aparecer en su teléfono celular a políticos, periodistas, analistas y empresarios, entre ellos al expresidente Carlos Salinas y al magnate Carlos Slim (quienes se ven incómodos al ser grabados por la panista). Aparecieron en imagen el expresidente Felipe Calderón, Carlos Navarrete; Ciro Gómez Leyva, Jorge Castañeda y el empresario Olegario Vázquez.

Este evento demuestra que Gálvez pertenece a esa clase política de la que dice no formar parte y a la cual, supuestamente, se impuso con el apoyo ciudadano en el proceso para obtener la candidatura presidencial del Frente Amplio por México que integran el PAN, PRI y el PRD. “Creo que realmente yo estoy aquí por los ciudadanos, lo que más me gusta a mí es estar con la gente”, señaló la panista en una entrevista con el periódico español El País del pasado 2 de septiembre, en la cual vuelve a repetir el eslogan publicitario y engañoso de que, lo que la llevó a ganar la candidatura, fue tener: «Una personalidad propia, ser disruptiva, ser outsider y no me gustaría que me encasillaran, que me encajonaran, lo que le gusta a la gente es un poco ese desparpajo, ese ponerme al brinco, es decir las cosas como son, eso es lo que yo digo cuando digo que me dejen ser».

La política hidalguense se autoengaña cuando enfatiza que le importan las personas y que a éstas les agrada su personalidad ramplona y la supuesta desenvoltura y desparpajo con la que actúa. Un hecho que demostró el verdadero uso e interés que Gálvez tiene con la gente, además de su menosprecio y escarnio hacia las comunidades más vulnerables, fue cuando encabezó la entonces delegación Miguel Hidalgo y autorizó operativos para combatir posibles faltas administrativas. La panista autorizó a uno de sus funcionarios, el entonces Director General de Administración, Arne aus den Ruthen Haag, –quien se ostentaba con el título pomposo de city manager, cargo inexiste y por ende ilegal– a que grabara en vivo a través de la aplicación Periscope, estos operativos en los cuales iba a cazar a hombres y mujeres que estuvieran infringiendo las normas civiles.

Tras recibir 7 quejas ciudadanas en torno a estos operativos, la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal analizó 3 de estas denuncias, por las que emitió la Recomendación 19/2018 a la actual Alcaldía Miguel Hidalgo, ante el “tratamiento ilegal y arbitrario de datos personales”, que se derivó de la transmisión en vivo de dichos operativos a través de Periscope, realizados por Ruthen Haag y con la anuencia de Gálvez.

De acuerdo con el boletín de prensa 173/2018, la presidenta de la CDHDF, Nashilei Ramírez, explicó que el organismo a su cargo “acreditó violaciones a los derechos humanos”, a “la seguridad jurídica, a la protección de datos personales y a la vida libre de violencia y discriminación, luego de tres casos presentados ante la Comisión, que tuvieron a cinco víctimas directas: un niño, dos mujeres trans, una persona mayor con discapacidad y una mujer.

En la Recomendación 19/2018, detalló que estos “sendos operativos”, se aplicaron en tres colonias de la Miguel Hidalgo, durante noviembre de 2015, y en marzo y abril de 2016, en los cuales Arne aus, se propuso “cazar” a vecinos que tiraban bolsas de basura; atender reportes vecinales “sobre ejercicio de prostitución”, y retirar una cadena que obstruía la vía pública.

En las tres transmisiones que hizo en vivo a través de Periscope, el funcionario aludido nunca informó a las personas que su imagen y otros datos personales estaban siendo difundidos de manera masiva en redes sociales. El 16 de marzo de 2016, el entonces Director General de Administración de la misma demarcación, grabó y transmitió en vivo a dos “víctimas” a las que manifestó que tenía un problema con ellas, y les leyó el artículo 24 de la Ley de Cultura Cívica, donde se establece incitar a la prostitución.

Tras subir a una unidad policiaca a sus dos víctimas, a pesar de que una de ellas negó que estuviera ejerciendo la prostitución, Arne continuó con la transmisión, apreciándose un diálogo que sostuvo con oficiales de policía, en donde se refiere a las víctimas (dos personas transexuales) en términos masculinos, y utiliza expresiones como “estaban muy fuertes”, “no pudo el oficial con los cinco” o “cuántos eran”. La resolución destacó que las “víctimas (…) sufrieron diversos daños derivados de la exhibición de la que fueron objeto por parte del servidor”.

El 23 de noviembre de 2015 aus den Rhuten realizó un operativo en la Unidad Habitacional Lomas de Sotelo, en el cual, con el mismo proceder autoritario, evidenció a una mujer –que iba acompañada de su hijo de seis años– quien dejó basura en un lugar no permitido. Por esos hechos, la víctima (que nunca se percató que ella y su hijo estaban siendo transmitidos en tiempo real a través de Periscope) fue remitida al Juez Cívico. La exhibición de la víctima y de su hijo en redes sociales y en portales de Internet, les ocasionó diversos daños, recibiendo comentarios despectivos, ofensivos y degradantes. A la mamá del niño, se le endilgó y etiquetó el apodo de “Lady Basura” y “Lady Marrana”. La CDHDF también tuvo conocimiento de otro caso, donde Arne aus al realizó otro operativo presuntamente agredió física y verbalmente a una persona con discapacidad.

En 2016, en un debate que sostuvo con la entonces presidenta de la CDHDF, Perla Gómez, a través de Milenio Televisión, Gálvez defendió el uso de Periscope argumentando la rendición de cuentas y la transparencia que debe haber en los operativos llevados a cabo por los servidores públicos; y al justificar la exhibición mediática como forma de castigo a los ciudadanos, alegó que si se es un vecino “que se conduce de la manera correcta, jamás vas a salir en el Periscope”.

Dos años después, en su Recomendación 19/2018, la CDHDF señaló que en el uso de la cámara del celular por parte de Arne aus den Ruthen Haag, al encabezar los mencionados operativos, y tener el dominio absoluto de la cámara, él decidía a quienes enfocaba. “Pese a la alegada intención de transparentar su actuación, en ningún momento aparece la imagen del propio servidor”, ni de “sus actuaciones físicas, siendo que se concentra en exhibir y difundir datos personales de las víctimas”, por lo que quedó acreditado que los operativos “fueron ilegales y arbitrarios”, además de que violaron los derechos a la seguridad jurídica y a la protección de los datos personales, e implicaron profundas afectaciones al derecho a una vida libre de violencia y discriminación de todas las víctimas.

Con la resolución asumida por la CDHDF quedó demostrada la política autoritaria, soberbia y racista que aplicó la entonces delegada Xóchitl Gálvez, a través de estos operativos mediáticos ejecutados por su city manager, cuyo objetivo era promocionar electoralmente la imagen de la política panista, a la par de hacer escarnio de las y los ciudadanos. Por eso, cinco años después de esta resolución, no es creíble que ahora, como afirman ella y los medios de comunicación que la respaldan, la aspirante presidencial manifieste interés por ayudar a la gente.

Tampoco es cierto que, la ahora aspirante panista a la presidencia diga, y sus paleros mediáticos reproduzcan , que a la gente le agrada su “personalidad propia” y con “desparpajo”, y decir “las cosas como son”, que supuestamente es la esencia de la panista. Así lo demostró el abogado de Televisa, Javier Tejado Dondé –férreo defensor de los monopolios de comunicación y más inclinado políticamente al prianismo– en su columna publicada en El Universal del 13 de septiembre “Xóchitl aleja a sus votantes mujeres”, en donde refiere dos hechos grotescos protagonizados por la ¿irreverente? Gálvez.

Uno de ellos se suscitó en la ciudad de Chihuahua el pasado 21 de julio, cuando la desparpajada candidata del PRI-PAN-PRD, asistió a La Antigua Paz, una de las cantinas más tradicionales de la capital del estado, en donde probó el platillo popular que sirven en ese lugar, conocido como “la de la casa”, el cual tiene la figura de un pene y está “formado por pepino sazonado con betabel, tomates, repollo rebanado y crema”. Al verse motivada por la gente que le gritaba “mordida”, “mordida” a la panista no le quedo más que probar la comida. (https://enblancoynegro.com.mx/2023/07/23/ video-xochitl-galvez-si-probo-la-del-casa-en-laantigua-paz/). De acuerdo con Tejado Dondé, el post de ese hecho “tuvo un alcance de un millón de personas y 90% de comentarios negativos”.

El segundo suceso, se dio el sábado 9 de septiembre, cuando se transmitió el programa “En la cama con”, producido desde el hotel Fiesta Americana Reforma, y conducido por el periodista español Alberto Peláez. La conversación entre el periodista y la panista se da mientras están acostados y metidos en la cobija de una amplia cama.

La plática fue superficial (como la personalidad del periodista y la candidata) y con lugares comunes de la publicidad política que promueve el equipo de la panista: que fue un error que el presidente Andrés Manuel López Obrador no le abriera las puertas de Palacio Nacional, lo cual la benefició en su popularidad; que Claudia Sheinbaum no tendrá un día de campo cuando se enfrente con Gálvez en la contienda electoral.

Además, se dedicó a mentir, al asegurar que, cuando formó parte del gabinete de Vicente Fox y en su desempeño como delegada de la Miguel Hidalgo, nunca hubo un solo caso de corrupción; omitiendo referirse o explicar las acusaciones en su contra por los cuantiosos contratos, al menos por 65 millones de pesos, que su empresa High Tech Services, y la de su marido, Rubén Sánchez Manzo, “Operación y Mantenimiento a Edificios Inteligentes”, recibieron durante la administración foxista cuando ella se desempeñó como titular de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas.

En lo que respecta a su paso como delegada en la Miguel Hidalgo, Gálvez no explicó los hechos de corrupción inmobiliaria en los que está inmiscuida, en tanto que el obsequioso periodista español tampoco la cuestionó al respecto. Lo más destacable de esa entrevista a modo, fue cuando la política panista mostró sus deficiencias. Al referirse a los foros de discusión que hubo entre los candidatos a encabezar el Frente Amplio por México, dijo que estos eventos le dieron la oportunidad de estudiar temas de índole internacional, económicos, de seguridad social y de salud, materias que, se pensaría, como aspirante a gobernar México debería de conocer.

“Eso me va ayudando para irme empapando. Yo, obviamente, conocía muy bien los problemas de la ciudad y ahora necesito empaparme de los temas del país, como el tema de seguridad, el tema de geopolítica. Yo nunca había sido experta en temas internacionales, porque yo soy más que ingeniera: cambio climático, medio ambiente, anticorrupción (parece una broma cuando ella misma no está exenta de actos de corrupción), zonas metropolitanas, movilidad, o sea, pues mis temas son como tecnológicos”.

De acuerdo con Tejado Dondé, dicha entrevista tuvo un alcance de 286 mil personas “y también un sentimiento muy negativo (…) Con estos tipos de mensajes y sus discursos, en donde dice groserías, parece que está alejando el voto de las mujeres en su entorno”, añadió en su columna referida líneas arriba el abogado de Televisa, quien comentó que cuando Gálvez fue entrevistada “en N+ (Televisa) el 31 de agosto por Enrique Acevedo, la audiencia tuvo una caída de cientos de miles de personas”.

A pesar de las cuestionables acciones de escarnio ciudadano que asumió cuando fue delegada; de minimizar o evadir los posibles actos de corrupción inmobiliaria de los que se le acusa; de los millones de pesos de recursos públicos que sus empresas han recibido, especialmente cuando fue funcionaria pública; de su desconocimiento de temas que son esenciales para gobernar el país; y de su personalidad vulgar, ramplona y superficial, la candidata del Frente Amplio por México tiene un buen número de medios y periodistas paleros que pretenden engañar a la gente con el cuento de que Gálvez es una outsider (El País, el Financial Times, El Universal); o una candidata ciudadana que le arrebató a los partidos políticos y sus estructuras, la candidatura presidencial; “ella es refrescante y de origen popular (…) Xóchitl hace lo que le da la gana”, aseguró la siempre cursi Soledad Loaeza, columnista del periódico Reforma.

Ese mismo 31 de agosto, cuando la política panista hizo bajar el rating del canal N+ de Televisa, en su noticiero matutino en Radio Fórmula, los “periodistas” Ciro Gómez Leyva y Manuel Feregrino, convertidos en promotores de la candidatura de Gálvez, celebraron que un día antes la candidata del PRI, Beatriz Paredes, había reconocido que las encuestas mandadas a realizar por el frente opositor, no la favorecían; pero al mismo tiempo le recriminaron varias veces durante el programa, que no felicitara formalmente a su contrincante. Y al entrevistar de forma separada a la propia Gálvez quien insistió con la falsedad de que no fue una candidata de los partidos, sino una candidata externa) y al presidente del PRI, también le reprocharon, como si fueran los jefes de campaña de la aspirante panista, que la tlaxcalteca no reconociera claramente el triunfo de la foxista Gálvez.

Y en el extremo de la manipulación mediática y de publicidad política disfrazada de periodismo, cuando en otro segmento del noticiero abordaron la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y las supuestas anomalías cometidas por este gobierno en las investigaciones para dar con el paradero de los estudiantes, Gómez Leyva se atrevió a decir: “Por esto y por muchas otras razones ¿creen que este gobierno va a ir a las elecciones del próximo año en paz, tranquilo para que la gente vote, que gane el que sea?” a lo que su comparsa Feregrino respondió envalentonado y supuestamente indignado: “No, claro que no Ciro”; a lo que este prosiguió con una amenaza velada para el actual subsecretario de derechos humanos de la Secretaría de Gobernación: “Tú crees que Alejandro Encinas va a poder estar tranquilo después de esto, si gana, si ganara Xóchilt Gálvez, si cambiaran las cosas, pues difícilmente lo estarían”.

Días después, cuando avanzaban las denuncias hechas por el ex alcalde de Miguel Hidalgo, Víctor Hugo Romo en torno a los actos de corrupción inmobiliaria de Xóchitl Gálvez, el 13 de septiembre en el programa de opinión de Televisa, Tercer Grado, la mayoría de sus “analistas” asumieron una postura acrítica ante tales denuncias, demostrando que ni siquiera leyeron el reportaje publicado en el portal sin embargo; y sin tapujos ni rubor, se mostraron como los propagandistas que son de la panista a la que están inflado artificialmente:


–Leo Zuckermann: “Que Xóchitl tiene una capacidad de reacción impresionante (…) No cualquier político la tiene. Le tiran y le tiran durísimo y ella sale con un video pum, le da la vuelta y aparece hasta graciosa (…) Yo sí creo que lo que estamos viendo es que va a ser una candidata muy poderosa”.

– Genaro Lozano: (…) ¿Cómo empieza Xóchitl? Empieza cuestionada con esta investigación sobre su propiedad en Miguel Hidalgo.

– Denise Maerker ¿De verdad?

–Genaro Lozano: Yo digo que sí.

Ahí está la evidencia.

–Denise Maerker: Empieza siendo atacadísima.

–Genaro Lozano: ¿Bueno, puedo acabar? Y ahora resulta que ella como jefa delegacional, resulta que no sólo dio un permiso a una constructora, sino además tuvo un descuento de 5 millones de pesos; y luego, además, lo ocupa sin permiso de la delegación.

–Leo Zuckermann: No creo que le des eco a eso (…) Perdóname, pero está horrible darle eco a esos rumores.

–Genaro Lozano: No es ningún rumor, ahí están las pruebas.

–Leo Zuckermann: Esa es una invención de un pillo que se llama Victor Hugo Romo.

–Raymundo Riva Palacio: Le han hecho una campaña durísima.

–Denise Maerker: Durísima, incluyendo esto.

Si hubieran tenido el tiempo e interés para leer las distintas informaciones que sin embargo ha publicado en torno a las irregularidades en torno a las propiedades de Gálvez, los periodistas–xochilovers (hasta en eso la panista y sus propagandistas carecen de originalidad, al plagiarse la palabra amlovers, como se definen los seguidores de AMLO), Zuckermann, Maerker y Riva Palacio, se hubieran dado cuenta que hay documentos que prueban las irregularidades que rodean los inmuebles de la panista.

Pero para estos opinadores que se hicieron famosos durante los gobiernos del prian, no es importante ofrecer elementos para que sus televidentes se formen una mejor opinión, sino lo que pretenden es proteger a la candidata de los políticos, empresarios y periodistas que han perdido privilegios y que ambicionan recuperar el poder para volver a hacer negocios al amparo de las instituciones públicas.

*Periodista y analista @GerardoIMontes

18 de octubre de 2023