El fallecimiento de José Agustín Ramírez Gómez, uno de los escritores más importantes y originales de la literatura mexicana contemporánea, impactó en los ámbitos literario y político del país. El autor, que padecía de cáncer desde hace varios años, murió ayer a los 79 años en su casa de Cuautla, Morelos, rodeado de su familia y amigos.
José Agustín fue el precursor de la llamada «literatura de la onda», aunque a él no le gustaba mucho ese término, acuñado por la escritora Margo Glantz.
Ese estilo de literatura surgió en la década de 1960, caracterizada por romper con los moldes tradicionales de la narrativa nacional, incorporando elementos de la cultura popular: rock, cine, humor y rebeldía juvenil. Sus novelas, cuentos, ensayos, obras de teatro y guiones de cine reflejaron la realidad que vivió su generación, con un lenguaje coloquial, fresco y desenfadado que cautivó a miles de lectores.
José Agustín no solo fue un escritor, también periodista, ensayista, traductor, dramaturgo, director y guionista de cine. Su versatilidad y su pasión por el arte lo llevaron a colaborar en la prensa escrita: Piedra Rodante, Pop, Cine Avance, Eclipse, Caballero, Claudia, El Cuento, Diálogos, El Corno Emplumado, Quimera, México en la Cultura, El Día, El Heraldo de México y Excélsior. También fue conductor y productor de programas culturales de radio y televisión, y coordinador de talleres literarios. Entre sus incursiones en el cine, destacan el largometraje «Ya sé quién eres (te he estado observando)» (1971), que dirigió, y el guion de «El rey de la vecindad» (1985), que escribió.
Su creación literaria abarca más de 40 títulos, iniciada públicamente con la novela «La tumba» (1964), que escribió a los 19 años y que causó escándalo por su temática existencialista y sexual. Le siguieron otras novelas como «De perfil» (1966), «Se está haciendo tarde (final en laguna)» (1973), «Ciudades desiertas» (1982), «Cerca del fuego» (1986), «La panza del Tepozteco» (1992) y «Dos horas de sol» (1994), entre muchas otras. También publicó relatos como «Inventando que sueño» (1968), ensayos como «La nueva música clásica» (1969) y «La contracultura en México» (2007), obras de teatro como «Abolición de la propiedad» (1969) y «Círculo vicioso» (1974), y crónicas históricas como «Tragicomedia mexicana» (1991-1992).
Su trabajo fue reconocido con varios premios, entre ellos el Premio Nacional de Literatura «Juan Ruiz de Alarcón» (1993), el premio «Dos océanos» del Festival Internacional de Biarritz, Cine y Cultura de América Latina (1995), la presea «Juan R. Escudero» del Puerto de Acapulco (2005), la medalla Bellas Artes (2011) y el Premio Nacional de Ciencias y Artes en Lingüística y Literatura (2011). Además, fue becario del Centro Mexicano de Escritores, de la Fundación Guggenheim y de la Universidad de Iowa. Su obra ha sido traducida a varios idiomas y adaptada al cine y al teatro.
Su vida personal también estuvo marcada por el amor, la aventura y la polémica. Se casó dos veces, la primera con la historiadora y novelista Margarita Dalton, con quien viajó a Cuba para participar en la alfabetización, y la segunda con Margarita Bermúdez, con quien tuvo tres hijos: José Agustín, Jesús y Andrés. Su padrino de bodas fue el escritor colombiano Gabriel García Márquez, quien fue su amigo y admirador. También tuvo un romance con la actriz y cantante Angélica María, que causó revuelo en la época.
José Agustín murió a causa de un cáncer que padecía desde hace varios años. Su salud se había deteriorado desde el 2009, cuando sufrió un accidente que le causó graves problemas. El 2 de enero, recibió la extremaunción de un sacerdote amigo de la familia. Su hijo Andrés Ramírez informó que el escritor se despidió en paz, rodeado del cálido amor de su familia, en su casa de Cuautla, Morelos. Su muerte conmocionó al mundo literario y cultural, que reconoce la importancia de su obra.
-Ulises García Juárez
