La postura del director mexicano Guillermo del Toro sobre el uso de la inteligencia artificial (IA) en el cine trascendió a un posicionamiento artístico compartido por miembros del gremio cinematográfico.
“Quiero sets reales, quiero ver personas pintando, construyendo, taladrando. No quiero algo digital, no quiero IA, no quiero simulación. Quiero artesanía de la vieja escuela”, aseveró del Toro durante una entrevista en la National Public Radio, de Estados Unidos.
Afirmó que “preferiría morir” antes de utilizar esta herramienta tecnológica durante la elaboración de uno de sus filmes.
De esta manera, el triple ganador del Oscar amplió el debate sobre la IA y la responsabilidad en su uso, al comparar a los entusiastas que promueven esta tecnología con la “arrogancia de Frankenstein”, personaje de su nueva cinta basada en la novela homónima.
“Estos programadores lanzan plataformas y aplicaciones sin pensar en las consecuencias para la sociedad. Esa actitud me parece peligrosa y carente de responsabilidad”, expresó.
Del Toro explicó que su versión de Frankenstein busca un paralelismo con quienes promueven la IA: “Es alguien un poco ciego (Víctor Frankenstein), que crea algo sin pensar en las consecuencias. Y creo que necesitamos hacer una pausa y reflexionar hacia dónde nos dirigimos”.
Sobre lo anterior, sostuvo que la fascinación por las posibilidades que ofrece la IA afecta la valoración del esfuerzo y el arte humanos: “La inteligencia artificial, especialmente la IA generativa, no me interesa ni me interesará jamás. Tengo 61 años y espero seguir igual de desinteresado hasta el día en que me muera”.
Camila Doroteo
