Aún a costa de las mil y una especulaciones que hizo la opinión pública sobre su salud, el presidente Andrés Manuel López Obrador regresó a conducir las conferencias de prensa matutinas después de haberse ausentado cuatro días tras contagiarse, por tercera ocasión, de Covid-19.
Este 28 de abril, para sorpresa de muchos —porque no se había anunciado— el jefe del Ejecutivo apareció en el Salón de Tesorería en Palacio Nacional para agradecer al pueblo de México las manifestaciones de apoyo y solidaridad que recibió.
Su enfermedad por Covid-19 generó una ola de desinformación y muchísima especulación que circuló en redes sociodigitales y medios de comunicación, el mandatario aprovechó para señalar los comentarios como prácticas poco éticas de medios de información —con honrosas excepciones-, como siempre subraya.
Al ser cuestionado sobre el tema, el presidente se dirigió a Televisa para pedir que “ya no siga contratando a gente sin ética, sin moral, que realmente informen, que no manipulen”, comentó recordando las especulaciones que se difundieron sobre su salud. “El grado de desfachatez, el cretinismo de estas gentes”, criticó.
Dijo que por ello retomó las conferencias matutinas —que habían sido encabezadas por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López— pues consideró prioritario aclarar temas importantes que se prestaron a desinformación, además del tema de su salud, la venta del avión presidencial, por ejemplo, aclarada y explicada a detalle por Jorge Mendoza, director del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos.
Informó que se encuentra recuperado, y que las únicas recomendaciones que se le recetaron fue descansar y “tomar mucha agua”, anunció que continuará con las reuniones que dejó pendientes durante sus días de aislamiento, por lo que el siguiente fin de semana retomará la gira interrumpida para supervisar el último tramo del Tren Maya.
Diana Morán Reyes
