“Es un ejercicio de la libertad de manifestación, de expresión de las ideas, un cambio radical”, defendió hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador las conferencias de prensa matutinas ante la petición que ha circulado de cancelarlas por considerarlas un ejercicio que le rinde culto.
Las conferencias de prensa matutinas, conocidas comúnmente como “mañaneras”, son encabezadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador de lunes a viernes desde el 3 de diciembre de 2018, cuando asumió el cargo; inician a las 7 de la mañana y finalizan alrededor de las 9-10 de la mañana. En ellas se trata la agenda mediática, se “rinden cuentas” de lo realizado en lo que va del sexenio y se discute mucho del debate entre el gobierno y los opositores.
A propósito del cumplimiento de las 1000 transmisiones de “mañaneras” que se cumplieron en este diciembre, circuló una petición para la eliminación de las mañaneras, consideradas en muchas ocasiones una propaganda del gobierno federal. En la conferencia matutina de hoy se le preguntó al presidente qué opinaba del tema.
“La gente pide que haya información, que se garantice el derecho a la información. Desde luego a los opositores adversarios pues no les gusta que haya mañaneras, pero a la mayoría de la gente sí”, respondió con seguridad el presidente, quien descartó que desaparezcan, todo lo contrario, consideró realizarlas también en fines de semana “para que no les demos oportunidad de ninguna mentira”, aseveró.
“Y ahora quieren que no haya mañanera, pues puede ser que nos prohíban que haya mañanera, pero a lo mejor lo vamos a hacer a medio día”, ironizó el presidente. “No quieren que existan las mañaneras, aun teniendo todos los medios convencionales comprados o alquilados, como parte de sus empresas, quisieran que no existiera el derecho a disentir, la réplica”, puntualizó.
Aprovechó para referir al atentado que sufrió el jueves pasado el periodista Ciro Gómez Leyva y la posibilidad de que sea utilizado —o haya sido planeado, en todo caso— para perjudicar al gobierno, cosa que descartó porque “la gente sabe muy bien de que nosotros somos respetuosos de la vida y no nos atreveríamos a hacer una cosa así”. Aseguró que este suceso no va a tener efecto político “porque el pueblo tiene mucha información y ya no se deja manipular”.
No se han dado avances en la investigación, sin embargo, ordenó que se llegue a fondo del caso, y que “la única hipótesis que se debe de descartar, aunque eso va a corresponder a la autoridad, es que nosotros, el gobierno que yo represento no es un gobierno represor”, aseveró.
Diana Morán Reyes
