El diputado Ernesto Villarreal Cantú, coordinador del Grupo Parlamentario del PT en el Congreso de la Ciudad de México III Legislatura, presentó una Iniciativa con Proyecto de Decreto mediante la cual se propone declarar el primer domingo de febrero de cada año como “Día del Pulque en la Ciudad de México”, con el propósito de reconocer, preservar y difundir el valor histórico, cultural y comunitario de esta bebida ancestral, considerada un símbolo de identidad y patrimonio vivo de la capital del país.
La propuesta, sustentada en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Constitución de la Ciudad de México, la Ley Orgánica y el Reglamento del Congreso capitalino, tiene carácter conmemorativo y cultural, sin generar cargas administrativas o económicas adicionales, y busca visibilizar una tradición que articula campo, comunidad y ciudad a través del cultivo del maguey y la producción artesanal del pulque.
La iniciativa también busca dignificar la labor de las comunidades magueyeras, tlachiqueros y productores que mantienen viva esta tradición. El proceso artesanal de obtención del aguamiel y su fermentación natural requiere conocimientos transmitidos de generación en generación, por lo que su reconocimiento refuerza la protección del patrimonio inmaterial y el impulso al comercio justo y al agroturismo rural.
El diputado citó el Manifiesto Pulquero Ometochtli – Dos Conejo, documento elaborado por comunidades productoras, promotores culturales y consumidores, que reivindica el pulque como una expresión viva de identidad mexicana, profundamente ligada a la tierra, la cosmovisión indígena y la organización comunitaria.
Dicha celebración se vincula con antiguas festividades dedicadas a Ometochtli dentro del calendario nahua, y la fecha propuesta —el primer domingo de febrero— coincide con ferias y fiestas pulqueras que aún se celebran en Hidalgo, Puebla, Estado de México y la propia Ciudad de México.
La declaratoria, subrayó el legislador, busca también reparar el daño simbólico causado por las campañas de desprestigio que estigmatizaron al pulque y a quienes lo producían. Al reconocer oficialmente su valor cultural, la Ciudad de México da un paso firme hacia la reivindicación de las comunidades indígenas y populares que lo preservaron, fortaleciendo así los principios de diversidad, dignidad y justicia cultural.
El diputado Ernesto Villarreal agradeció la presencia de Raúl Guerrero, promotor de esta iniciativa; también a los grupos La Tremenda Korte; El Chino y su Gala, Panteón Rococó, Chava Rock, La Mixanteña de Santa Cecilia, Los Adheridos, Pulquipedia. A los promotores culturales Manuel Valdovinos, Manuel Amador y Paco Dorado, así como a las propietarias y los propietarios de las pulquerías que acompañaron el evento: La Antigua Roma, Agave 69, La Hija de los Apaches, La Canica, La Reyna Xóchitl, La Bella Carolina, La Catedral del Pulque y La Paloma Azul, quienes mantienen vivos estos espacios a través de la Asociación Nacional de Pulquerías Tradicionales.
Con esta iniciativa, el Congreso capitalino se convierte en pionero en la defensa del patrimonio biocultural del país, colocando al pulque en el lugar que merece: un emblema de la historia viva, la memoria colectiva y la identidad de la Ciudad de México.





