Ivonne Acuña Murillo
Hace pocas semanas, nadie imaginaría que un personaje como Samuel Alejandro García Sepúlveda candidato de Movimiento Ciudadano (MC) a la gubernatura del estado de Nuevo León, tendría posibilidades reales de ganar las elecciones. Conocidos errores de comunicación y el lugar en que aparecía en las encuestas así lo indicaban.
Sin embargo, en lo que parece un salto sorpresivo, García Sepúlveda logra remontar las encuestas para pasar, en tan sólo seis semanas, del cuarto al primer lugar en intención de voto. El secreto, se sostiene aquí, se encuentra en su estrategia de campaña. De libro se diría. Es un hecho que la complejidad de las sociedades actuales, en términos de número, tipos de relación, interacciones, fragmentación social, intereses, valores, campos de acción, imponen la necesidad de Samuel García: ¿qué pesa más: la campaña o el candidato? diseñar campañas electorales más eficaces para llegar al mayor número posible de votantes.
El segundo reto es persuadir a los (as) votantes, apelando a sus emociones. Pero ¿Qué papel desempeñan en este punto las y los candidatos? ¿Acaso para ganar basta con la campaña sin importar la calidad de quien pretende ocupar un puesto de elección popular?
Estas preguntas no son retóricas toda vez que, efectivamente, cabe analizar si una buena campaña permitiría a cualquier candidato (a) vencer a sus adversarios políticos y ganar la elección.
Se diría que lo ideal es contar con ambas cosas: un buen candidato (a) y una campaña electoral bien diseñada. Sin embargo, no siempre ocurre de esta manera. En ocasiones un mal candidato tiene la suerte de contar con un magnífico equipo de expertos, capaces de diseñar la campaña idónea en función de la ciudadanía a la que va dirigida. Y, a la inversa, también en ocasiones un gran candidato puede salvar con éxito el obstáculo que representa una mala estrategia de campaña.
Cabe anotar que una adecuada estrategia incluye la conformación de la imagen del aspirante o lo que se conoce como el diseño de la marca.
¿En cuál de los tres casos se encuentra Samuel García? ¿Es un buen o mal candidato con una bien diseñada campaña electoral? o ¿Es un mal candidato con una mala campaña electoral? La tesis a defender en este artículo es que: se trata de un mal candidato con una excelente campaña electoral, misma que bien puede llevarlo a ganar la gubernatura de su estado natal.
Pero ¿Quién es Samuel García?
Samuel Alejandro García Sepúlveda nació en Monterrey, Nuevo León, el 28 de diciembre de 1987. De acuerdo con información publicada en Wikipedia es “un político, abogado, escritor, politólogo, financiero y funcionario público mexicano”, militante del partido Movimiento Ciudadano.
Estudió la licenciatura en Derecho y Finanzas en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM); la Maestría en Derecho Público y el Doctorado en Política Pública y Administración Pública en la Escuela de Graduados en Administración Pública y Política Pública del
mismo ITESM; Relaciones Políticas entre Estados Unidos de América y México en la Escuela Harvard Kennedy; un curso sobre la Unión Europea y Derecho Internacional Público en el Cornell-Paris I Summer Institute de la Cornell Law School y la Universidad de París I Panthéon-Sorbonne, en París, Francia. Actualmente se encuentra cursando un tercer doctorado en Derecho Constitucional en la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL). En el campo de la abogacía es socio director de la firma García Mascorro Abogados, S.C. y socio fundador de los despachos Firma Jurídica y Fiscal, S.C. y Firma Contable y Fiscal, S.C.
Se reitera: la información anterior aparece en Wikipedia y no ha sido confirmada por quien escribe.
Antes de la pretendida candidatura se desempeñó como diputado local en el Congreso de Nuevo León (1 de septiembre de 2015 al 31 de agosto de 2018), curul a la que llegó por la vía de representación proporcional plurinominal a la edad de 27 años; coordinador de Movimiento Ciudadano en Nuevo
León (22 de enero de 2017 al 9 de agosto de 2019); y senador de la República (1 de septiembre de 2018 al 8 de enero de 2020). Como meteórica podría calificarse la carrera de Samuel García.
Está casado con la influencer Mariana Rodríguez Cantú, quien en la misma página de Wikipedia es citada como empresaria, psicóloga e influencer.
Del cuarto al primer lugar
La popularidad de Samuel García aumentó 24 puntos en tan sólo 45 días. Dos son las razones que podrían explicar este veloz ascenso.
Primera, la caída de la candidata por Morena, Clara Luz Flores, quien ocupara el primer lugar en las preferencias electorales, y que en cosa de pocas semanas pasó al tercer lugar. Su estrepitosa caída se dio después de que se filtró a medios un video donde aparecía en amena conversación con Keith Raniere, líder de la secta Nxivm, condenado a 120 años de prisión por un tribunal de Nueva York, en octubre de 2020, por dirigir una secta en la que mantenía a varias mujeres como esclavas sexuales, por tráfico sexual y posesión de pornografía infantil.
La candidata negó de manera reiterada, en entrevista con el periodista Julio Hernández López (Astillero), del 10 de marzo, conocer personalmente al líder de dicha secta, afirmando haber tomado un curso en Nxivm como cualquier otra persona. (La entrevista se encuentra en YouTube como “Miles tomaron curso de NXIVM; lo hice para superar traumas tras atentados que viví: Clara Luz Flores”). Días después, el miércoles 24 de marzo, Adrián de la Garza Santos, candidato de la coalición PRIPRD a la misma gubernatura hizo circular un video en el que se observa a Clara Luz Flores dialogando con Keith Raniere.
Posteriormente, se pudo constatar, gracias a la información proporcionada por Frank Parlato, exmiembro de Nxivm, que no sólo lo conocía sino
que formaba parte de su organización, en la que había alcanzado el nivel de “banda amarilla”, lo que la convertía en una posible reclutadora de mujeres para ser marcadas en sus partes íntimas como esclavas sexuales del líder de la secta (La información completa se encuentra en https:// frankreport.com/2017/11/02/mayor-clara-luz-floresof-escobedo-nuevo-leon mexico-is-a-coach-forcult-that-brands-women/)
Las mentiras de la candidata y la evidencia que circuló en todos los medios de comunicación y que Adrián de la Garza pretendía capitalizar en su favor, fueron suficientes para despertar el rechazo de la ciudadanía.
En un primer momento, todo parecía indicar que se cumpliría el deseo del candidato del PRI-PRD. De acuerdo con encuesta de El Financiero, del 6 de
abril, Adrián de la Garza obtuvo 30% de intención de voto; Clara Luz el 26%, Fernando Larrazábal, del PAN, el 21% y Samuel García el 19%. (Nota de la Redacción publicada el 6 de abril, “Morena cae y el PRI aventaja en cerrada elección para gubernatura de Nuevo León”).
Sin embargo, la felicidad no duró mucho. En la encuesta del periódico Reforma, publicada el lunes 19 de abril, Samuel García había desplazado a de la Garza haciéndolo descender al segundo lugar con 27% de intención de voto, mientras él ocupaba el primero con el 32%; Clara Luz Flores, el 16%; y Fernando Larrazábal, el 15%.
En la misma encuesta, se preguntó ¿por quién nunca votaría? Las respuestas colocaron a Clara Luz Flores nuevamente en primer lugar con el 33%, a De la Garza con 29%, a Larrazábal en tercer lugar con 14% y a Samuel García en cuarto lugar con el 10% de menciones. Lástima que la pregunta no fue ¿Quién le gustaría que ganara las elecciones?
Mal candidato
La segunda razón que ha permitido a Samuel García posicionarse en el primer sitio en intención de voto es, precisamente, una muy bien diseñada campaña electoral, la cual ha permitido, incluso, obviar los errores del candidato.
Todos conocen los videos, subidos por el mismo García o su esposa, en los que el candidato hace gala de machismo, desinformación, insensibilidad y desconocimiento de otras formas de vida que no sean las del privilegio.
En clásico se ha convertido su “sube la cámara, estás enseñando mucha pierna, chinelas”, regaño dedicado a su esposa Mariana, quien se resistió a obedecer la orden por lo que el político completó: “Pos me casé contigo pa’mí no pa’que andes enseñando”.
Otros dos videos más fueron colocados en medios por el mismo Samuel, aquel en que, en compañía de Mariana, pretendió donar una tonelada de croquetas a un centro de apoyo a niños con cáncer, “Manitas Pintando Arcoíris”, pensando que alojaban “perritos” y otro, en donde se quejó de la crueldad de su padre quien lo obligó a jugar golf y terminar los 18 hoyos (una sola vez), como castigo por una noche de copas. Sin embargo, su vida de privilegio no le impide entender lo que debe ser pasarla con un “sueldito de unos 40 o 50 mil pesos mensuales y aun ser felices”.
Por si no fuera suficiente también Mariana ha logrado fama pública, no sólo por su actividad mediática como influencer, sino por la forma sencilla con que comparte con sus seguidores “el dolor” de una “vida dura” marcada por una serie de obstáculos como: la perdida de sus chanclas en la playa, la caída de su iphone en la Marina y de su San Benito después.
Destacan también, el video donde relata como “le llegó a Samuel”, su curso “En casa” para saber lavar el baño, tender las camas, planchar camisas, producción que recomendó a otras amas de casa pues “ahí pueden mandar a sus empleadas de su casa…para que las capaciten”.
No podían faltar otros videos en pareja, aquel donde ella luce sus tenis “fosfo, fosfo” como respuesta a una pregunta de su esposo que nada tenía que ver con su calzado y el más reciente donde ambos muestran lo dura que sigue siendo la vida para ellos, pues debido a los eventos de campaña y las infames asoleadas, la piel de Samuel se enrojeció “terriblemente”. Por supuesto, la grabación la hace Mariana quien dirige a su esposo para que muestre las terribles huellas en su cuerpo.
Aplica aquí lo que el sociólogo estadunidense John Thompson llama “nueva visibilidad”, la cual es posible gracias a la aparición de múltiples medios de comunicación, los cuales permiten que aspirantes sean vistos por todo el mundo. Visibilidad que les ayuda a posicionarse, pero que a la vez opera como un “arma de doble filo” por el riesgo que entraña el ser observado todo el tiempo.
En este caso, son el mismo candidato y su esposa quienes se exhiben una y otra y otra y otra vez.
Una buena campaña
Sin embargo, a pesar de los errores por los que mucha gente en Nuevo León había decidido no votar por Samuel, sus estrategas han logrado lo que parecía imposible, colocar al candidato en el primer lugar de preferencias.
Dos podrían ser los elementos centrales de su estrategia de campaña: la construcción de una narrativa fresca y juvenil, en la que además de ideas nuevas se utilizan elementos y personajes que ya antes le habían dado buenos resultados a Movimiento Ciudadano y la inclusión de Mariana Rodríguez como el principal activo de Samuel en esta campaña.
El eje central de esta nueva narrativa es la idea de “sacar de Nuevo León a la vieja política priista”, dejando atrás el pasado y celebrando una nueva vida. En dos videos se expresa claramente esta propuesta: el de navidad en el que Samuel y Mariana cantan: “El camino es complicado, todos hemos tropezado, pero ante la adversidad hay que volver a empezar. Hay que dejar el pasado que lo nuevo ha comenzado y en cualquier dificultad nos podemos ayudar. Es el comienzo, todo estará mejor. Ponte nuevo, ponte león, ponte nuevo, Nuevo León”.
El video donde Samuel y Mariana cantan con “Yuawi”, el niño de origen indígena que hizo famoso el single de Movimiento Ciudadano, el mismo que cantó con Ricardo Anaya, en su campaña presidencial de 2018 y ahora repite con Samuel y Mariana, para “celebrar a la vida” y que al inicio dice:
“Puro Nuevo León, arráncate Samuel. Celebremos a la vida Nuevo León. Todo va a estar mejor. Disfrutemos cada día. Ponte nuevo, ponte león, ponte puro, Nuevo León”.
Aquí, hay que distinguir entre dos tipos de videos, los que toman ellos y los que toma el equipo, los cuales están muy bien pensados, cuidados y producidos. No sobra ni falta nada. Son claros, rítmicos, musicales, pegajosos, como la canción de Movimiento Naranja, de hecho, tienen en el fondo la misma lógica y la misma intención: tocar las emociones de la gente.
En ambos casos, por lo general se muestran como una pareja joven y bien avenida como en su viaje en metro o en lancha reproduciendo una de las escenas cumbre de la película “Titanic”.
El segundo elemento, pero no menos importante como se habrá notado, es la presencia continua de Mariana Rodríguez en la campaña. Ella es joven, bella, fresca, alegre, desenvuelta y talentosa en lo que respecta al baile y el canto, valores todos que son bien utilizados en favor de Samuel y su estrategia electoral. Son bien utilizados también sus seguidores, que tan sólo en Instagram ascienden a 1 millón 400 mil.
Bien asesorado y consciente de la importancia de su esposa en la campaña, el mismo Samuel enfatiza que Mariana “es mi compañera de vida, mi impulso y mi fuerza”.
A pesar de los errores de comunicación de Samuel García y su esposa Mariana Rodríguez, no sería difícil que su bien diseñada campaña electoral lo convirtiera en gobernador de Nuevo León
