En la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, el coordinador general del proyecto Olinia, Roberto Capuano, presentó los avances en el desarrollo del primer automóvil eléctrico mexicano, el cual tiene la finalidad de “ofrecer una movilidad sin emisiones al alcance de millones de mexicanos y mexicanas”.
Como parte del plan estratégico para posicionar a la ciencia como fuente de bienestar social, la empresa automotriz pretende utilizar la tecnología para la creación de un vehículo multifuncional, seguro y ecológico.
Capuano apuntó que hasta ahora la movilidad para la ciudadanía carece de “seguridad y formalidad”, según conversaciones con conductores, pasajeros y dueños de flotillas.

En cuanto al diseño, el coordinador de Olinia explicó que se dio prioridad a las necesidades de los usuarios: “No es desde la ingeniería, sino desde la empatía, centrados en torno a las necesidades de los y las mexicanas”.
Refirió que la estrategia para la realización de este proyecto “se enfoca en el diseño de una plataforma vehicular modular que permite construir dos herramientas de trabajo; la primera, es un vehículo de transporte de pasajeros que represente una verdadera alternativa al mototaxi, más segura”.
La segunda, un vehículo para uso comercial dedicado al reparto, y así, atender la “creciente necesidad de transporte de mercancías en entornos urbanos”.

Para este proyecto, Capuano apuntó que se creó un equipo multidisciplinario conformado por el Tecnológico Nacional de México, la UNAM, el IPN y centros públicos de investigación de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (Secihti).
Los autos Olinia serán “eléctricos, ligeros, pero con la potencia suficiente para subir las pendientes”, detallo el directivo, quien añadió que los vehículos podrán recargarse en cualquier enchufe convencional. En cuanto a su costo, el coordinador informó que no superará los 150 mil pesos: “Será menor al de cualquier coche a gasolina e inclusive que al de una moto”.
Camila Doroteo