A partir de este año, la Universidad Nacional Autónoma de México colabora con el Laboratorio Mundial de Educación Abdul Latif Jameel (J-WEL), del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), para elaborar estrategias que mejoren la educación.
Melchor Sánchez Mendiola, titular de la Coordinación de Universidad Abierta, Innovación Educativa y Educación a Distancia (CUAIEED), precisó que la UNAM es la primera institución pública de México que se suma a los trabajos de J-WEL, el cual cuenta con la cooperación de 32 instituciones educativas en el mundo.
El Laboratorio es una iniciativa que promueve la excelencia y transformación en la enseñanza en el orbe, a través de proyectos de investigación, talleres y eventos de intercambio de información con académicos e investigadores; participa con Uruguay, Colombia, España, Sudáfrica, Mongolia, Japón, entre otras naciones.
El trabajo que realizarán los expertos de la CUAIEED con los de J-WEL mejorará los contenidos en línea que produce la Universidad para profesores y alumnos, y también para otras naciones de habla hispana, detalló el también investigador.
La UNAM, a través de la Coordinación, aprovechará la asesoría de especialistas en temas como innovación curricular, investigación sobre educación en línea, flexibilidad entre modalidades educativas, así como el mejoramiento en la permanencia y el egreso.
En septiembre de 2020 la UNAM recibió la invitación del Instituto para participar con J-WEL, considerado “una especie de incubadora de cambio educativo”, que forma una comunidad de aprendizaje para impactar en los cinco continentes, comentó Sánchez Mendiola.
“Ahorita con la pandemia, la educación en línea y a distancia es una de nuestras grandes prioridades, y el MIT es de las organizaciones en todo el mundo que históricamente ha dejado su material de clases, presentaciones, lo pusieron gratis para todo el mundo. Participar con ellos en el contexto de la pandemia permite compartir experiencias”, comentó.
Sánchez Mendiola destacó que el MIT tiene interés en la experiencia de la UNAM en cursos a distancia en español para la comunidad hispanoparlante de todo el mundo, desarrollo de currículo y planes de estudio, apoyo a personas vulnerables, innovación y emprendimiento.
Detalló que J-WEL elabora materiales de educación preescolar, media superior y superior, lo cual permite tener el panorama de cómo la enseñanza impacta desde el inicio de la vida hasta la formación profesional.
“Participar con líderes y docentes de instituciones de todo el mundo es un escenario colaborativo que seguramente arrojará productos a corto y mediano plazo. Este primer año trabajaremos en diferentes reuniones y nos dará acceso a muchas cosas; el MIT es la institución del mundo que más ha trabajado en mapas curriculares, por poner un ejemplo”, describió el médico de formación.
La UNAM, continuó, a través de la organización estadounidense Coursera, es la universidad mexicana con mayor número de cursos masivos abiertos en línea en español (103). Las actividades con el MIT permitirán compartir recursos, dialogar sobre problemas comunes y crear estrategias para mejorar la experiencia de docentes y estudiantes.
Y enfatizó: “Uno de los huecos más fuertes que hemos tenido en el país, y en el mundo, es la limitación del acceso a laboratorios para hacer actividades prácticas, y el MIT ha avanzado mucho en el desarrollo de prácticas virtuales y de simulaciones que pueden, de alguna manera, ayudar a reemplazar estos retos y huecos en el aprendizaje de los alumnos”.
Recordó que durante los primeros meses de la pandemia se desarrolló educación remota de emergencia, con cierto componente de improvisación, ganas y creatividad de los profesores y estudiantes, pero en ocasiones se tradujo en llevar lo que se hace en el aula a la plataforma digital.
“Se ha probado ya bastante que no se trata de hacer lo mismo, sino transformar nuestras actividades docentes. El reto importante es poner primero el desarrollo educativo de todas estas actividades que hacemos, fundamentarlo, apoyarlo, sostenerlo en sólidos principios didácticos para que utilicemos los encuentros que tenemos”, aseveró el también investigador del Programa Universitario de Estudios sobre Educación Superior.
Las clases a través de diversas plataformas (Zoom, Google Meet, entre otras) pueden ser simultáneas (profesor-estudiante), pero también asincrónicas, para que cada quien entre en el momento que pueda, lo que implicará un tipo de interacción diferente para mayor aprovechamiento del tiempo, lo que podría ser el arma secreta de la educación en línea, agregó.
Otro gran reto es continuar con la preparación de los docentes mediante cursos, talleres, eventos y seminarios web que ofrece la Universidad para familiarizarlos con las herramientas, a fin de mejorar el proceso educativo, finalizó.