La Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) habría planeado el secuestro y asesinato del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, durante su estancia en la embajada de Ecuador en Reino Unido. El portal de noticias Yahoo News publicó el domingo que en 2017 funcionarios de la administración de Trump debatieron la viabilidad de tales operaciones.
Un exfuncionario de alto nivel de contrainteligencia reveló al portal de noticias que algunos altos funcionarios de la CIA y de la administración de Trump consideraron el asesinato del periodista, e incluso solicitaron “opciones” o “bocetos” para poder realizarlo. Los planes de la agencia también consideraban “un extenso espionaje a los asociados de WikiLeaks, sembrar la discordia entre los miembros del grupo y robar sus dispositivos electrónicos”.
Tales planes fueron resultado de la publicación por parte de WikiLeaks de herramientas de piratería de la CIA extraordinariamente sensibles, conocidas colectivamente como Bóveda 7, que para la agencia representaba «la mayor pérdida de datos en la historia de la CIA». Esta investigación de Yahoo News revela que fue “una campaña encabezada por Pompeo que dobló importantes restricciones legales, potencialmente puso en peligro el trabajo del Departamento de Justicia para enjuiciar a Assange y arriesgó un episodio dañino en el Reino Unido, el aliado más cercano de Estados Unidos”.
Sin embargo, los planes cambiaron a finales de 2017, “cuando los funcionarios estadunidenses recogieron lo que consideraron informes alarmantes de que los agentes de inteligencia rusos se estaban preparando para sacar a Assange del Reino Unido y llevarlo lejos a Moscú”.
En consecuencia, la CIA y la Casa Blanca “comenzaron a prepararse para una serie de escenarios para frustrar los planes de salida de Assange a Rusia, según tres exfuncionarios. Entre ellos se incluyen posibles tiroteos con agentes del Kremlin en las calles de Londres, chocar un automóvil contra un vehículo diplomático ruso que transportaba a Assange y luego agarrarlo, y disparar los neumáticos de un avión ruso que transportaba a Assange antes de que pudiera despegar hacia Moscú”.
En la actualidad, Assange se encuentra en una prisión en Londres esperando la decisión de los tribunales respecto de una solicitud de Estados Unidos para extraditarlo y enfrentar los cargos por irrupción de una red informática clasificada y conspiración para obtener y publicar documentos clasificados en violación de la Ley de Espionaje.
