El Servicio Federal de Supervisión de las Telecomunicaciones, Tecnologías de la Información y Medios de Comunicación (Roskomnadzor) de Rusia, advirtió a Facebook que enfrenta una multa de hasta el 10 por ciento de su facturación anual en el país a menos que elimine contenido que el gobierno ruso considera ilegal.
El regulador estatal de comunicaciones Roskomnadzor dijo a la agencia Reuters que planeaba enviar a los representantes de Facebook en Rusia una notificación oficial diciendo que había fallado repetidamente en eliminar la información prohibida.
Las supuestas violaciones de Facebook incluyen no eliminar publicaciones que contienen pornografía infantil, abuso de drogas y contenido extremista, como dio a conocer el diario Vedomosti.
El Servicio Federal ruso ha abierto 17 casos administrativos diferentes contra Facebook este año por no eliminar contenido prohibido, mostraron documentos judiciales, con 64 millones de rublos adeudados en multas o pendientes.
El gobierno ruso ha incrementado la presión sobre las empresas tecnológicas extranjeras en el último año como parte de su campaña para aumentar su control de internet, lo que ha incluido esfuerzos para hacer que las empresas almacenen los datos personales de los rusos en su territorio.
Las diferencias con Facebook se suman a la problemática del Kremlin con YouTube. El 28 de septiembre la plataforma de videos suprimió los canales DE y DFP, de la cadena rusa RT. La compañía estadunidense aseguró que el canal en alemán de RT había recibido una advertencia por difundir material que violaba su política sobre desinformación del coronavirus que finalmente derivó en un bloqueo de una semana.
Derivado de la suspensión de los canales, Rusia amenazó este miércoles a YouTube con un bloqueo y una multa si no restaura los dos canales estatales en alemán que la plataforma de videos, propiedad de Alphabet, la matriz de Google, cerró un día antes por vulnerar su política de información sobre la COVID-19.
El Kremlin acusó a YouTube de censura y el Ministerio de Exteriores ruso, que ha descrito la decisión de la plataforma de video como una “agresión informativa sin precedentes”, ha asegurado que pedirá medidas de represalia contra YouTube.
(Con información de Reuters)
