Trump cancela recursos para radio y tv públicos con medio siglo de transmisiones
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Trump cancela recursos para radio y tv públicos con medio siglo de transmisiones

Abraham Pensamiento

Durante más de medio siglo, la radio y la televisión pública estadunidense ha producido contenidos educativos y culturales, además de brindar servicio social a las comunidades en casos de desastres naturales como huracanes, incendios, tornados o temblores.

La Radio Pública Nacional (NPR) y el Sistema Público de Radiodifusión (PBS) son dos centros de información, producción, así como de entretenimiento que han gozado de reconocido prestigio por la calidad de sus producciones y contenidos durante décadas. Parte del presupuesto de ambos sistemas, les es otorgado por la Corporación de Radiodifusión Pública (CPB), institución que anunció su cierre de operaciones en septiembre, luego de que el congreso de ese país cancelara las asignaciones presupuestales.

La organización financia tanto PBS como a NPR y más de mil 500 estaciones locales de radio y televisión. La mayoría de los puestos de personal de la Corporación finalizarán el 30 de septiembre, según informó la Corporación para la Radiodifusión Pública (CPB) en un comunicado. Un pequeño equipo de transición permanecerá hasta enero de 2026 para ayudar a cerrar las operaciones.

“A pesar de los extraordinarios esfuerzos de millones de estadunidenses que llamaron, escribieron y solicitaron al Congreso preservar la financiación federal para la CPB, ahora enfrentamos la difícil realidad de cerrar nuestras operaciones”, dijo la presidenta y directora ejecutiva de la CPB, Patricia Harrison, en un comunicado.

NPR y PBS reciben alrededor de 500 millones de dólares en fondos públicos a través de la Corporación, informó CBS News. La Corporación desaparecería, no así la NPR ni la PBS.

La CPB no produce ninguna programación ni tampoco posee alguna emisora pública, pero sí administra mil 216 de radio; 365 canales de televisión; de los 544 usuarios totales de radio, 244 son considerados rurales; el 99% de los estadounidenses tiene acceso a los medios públicos; más del 70 por ciento de las aportaciones federales se destinan directamente a las estaciones de medios públicos.

La organización citó un proyecto de ley reciente del Comité de Asignaciones del Senado para el próximo año fiscal, que excluía la financiación de la CPB “por primera vez en más de cinco décadas”.

Además, la organización también citó un paquete de rescisiones federales, que canceló mil 100 millones de dólares aprobados para la CPB. El presidente Donald Trump firmó el proyecto de ley tras amenazar con retirar el apoyo a los senadores republicanos que no votaran a favor. Así lo confirmó el senador John Thune, quien dijo que aprobaron el pedido del presidente Donald Trump para eliminar los gastos supuestamente innecesarios.

La Corporación distribuye más de dos tercios del dinero a más de mil estaciones de radio y de televisión públicas en todo el territorio estadounidense, de acuerdo con información de medios estadunidenses. Aunque los fondos federales representan cerca del 1% del presupuesto total de NPR, suponen entre el 8 % y el 10% para sus más de mil 300 emisoras. Las estaciones públicas brindan servicios de emergencia y auxilio en casos de desastres naturales provocados por huracanes o tornados. Sin embargo, el gobierno de Donald Trump al recortar el presupuesto para la Corporación y a los sistemas de radiodifusión públicos comete un grave error ya que no sólo coloca en riesgo la existencia de aquellos medios, el empleo de sus trabajadores. Además, propicia también la desaparición de las radios estatales o comunitarias que funcionaban gracias al financiamiento a los medios públicos, y lesiona el derecho a la información de las audiencias.

La presidenta y directora ejecutiva de PBS, Paula Kerger, calificó la orden de ilegal y dijo que “amenaza nuestra capacidad de servir al público estadunidense con programación educativa, como lo hemos hecho durante los últimos 50 años”.

Del mismo modo, la presidenta y directora ejecutiva de NPR, Katherine Maher, aseguró que la radio pública es muy necesaria para los hogares estadounidenses: “La radio pública también es vital, conectando a las comunidades rurales con el resto del país y proporcionando transmisiones de emergencia y alertas meteorológicas vitales”.

En el caso de PBS, así sus estaciones asociadas, de acuerdo con su directora, aproximadamente el 15% de sus ingresos provienen de la CPB: “Esto es diferente a muchas otras emisoras públicas del mundo, que en gran medida dependen del Estado”, dijo en PBS NewsHour.

El gobierno de los Estados Unidos intenta recuperar más de mil millones de dólares, pues considera a las radios comunitarias y, en general, a los servicios públicos de radiodifusión innecesarios, además de que, según el mandatario, la línea editorial de estos es de izquierda, y no se alinean con la política del magnate Trump.

La senadora por Alaska, Lisa Murkowski, ha declarado que las estaciones “no solo son tu noticia, es tu alerta de tsunami, es tu alerta de deslizamiento de tierra, es tu alerta de volcán”. La advertencia viene después de que un sismo de magnitud 7.3 grados azotó el territorio de Alaska (Estados Unidos), lo que provocó una alerta de tsunami, y añadió que eso es “un recordatorio de que cuando escuchamos criticar cómo la radiodifusión pública no es más que este esfuerzo radical y liberal para contaminar la mente de la gente, creo que necesitan mirar cuáles son algunos de los servicios básicos para las comunidades”.

Reducen dinero para medios de propaganda yanqui

La desaparición de la CPB se da en medio de constantes recortes, desde la USAID, Medicare al igual que Medicaid y, más recientemente, con medios independientes de América Latina, así como del Caribe. Por ende, CPB comenzará con un “proceso ordenado de liquidación” de cada una de sus operaciones.

Empero, la misma presidenta del Comité de Asignaciones del Senado de los Estados Unidos, la también republicana Susan Collins, comentó que el proyecto de ley “tiene un gran problema: nadie realmente sabe qué reducciones de programas están incluidas”.

La batalla de Trump en contra de los medios públicos estadunidenses no sólo es en el Congreso, también ocurre en contra de otros medios de comunicación que reproducen la ideología y los intereses de Estados Unidos fuera de ese país. A principios de mayo, un Tribunal de Apelaciones, con sede en Columbia, determinó que la administración del presidente podrá retener el dinero que estaba destinado para Radio Free Europe/Radio Liberty, Radio Free Asia y Middle East Broadcasting Networks, organizaciones que reciben fondos federales, las cuales brindan cobertura de noticias a países con libertades de prensa limitadas.

Esta decisión consiguió revocar dos sentencias de juzgados inferiores, quienes impidieron que la Casa Blanca retuviera el dinero que estaba destinado para las tres empresas de noticias. Esta decisión no sólo afectará a estos medios de comunicación, también impactará a 140 millones de oyentes en todo el mundo.

Dos de los tres jueces de la Corte de apelaciones que supervisan el caso, Gregory G. Katsas y Neomi Rao, fueron nombrados por Trump. La tercera, Cornelia Pillard, recibió el nombramiento del expresidente Barack Obama.

Historia de los medios públicos

En 1967, el presidente Lyndon B. Johnson aprobó la Ley de Radiodifusión Pública, con lo que se creó la CPB, una corporación no comercial. En 1970 se crearon el PBS y el NPR.

Por razones políticas, el magnate Trump cancela recursos para las emisoras públicas, sin embargo él recibe cobertura internacional cotidiana de sus actividades políticas, además mantiene presencia a través de su red sociodigital, Truth Social en donde tiene 220 millones de usuarios activos, según la empresa de estadísticas. Demand Sage.

30 de septiembre de 2025