Ante la preocupación de rechazo hacia los extranjeros reflejada en la marcha antigentrificación del pasado 4 de julio en las colonias Condesa y Roma, en la CDMX, la presidenta Claudia Sheinbaum condenó los actos de violencia durante la manifestación y aseguró que su gobierno trabaja en garantizar el “derecho a la vivienda”.
Al ser interrogada sobre si su administración planea alguna legislación para evitar el desplazamiento de una población por otra con mayor poder adquisitivo (gentrificación), la mandataria descartó tal posibilidad, pero aseguró que se tienen contempladas otras estrategias.
La CDMX, así como otros destinos turísticos en el país, han sido afectados por ese proceso que incrementa el costo de vida, sobre todo en precios de renta o vivienda.
En la conferencia matutina de este miércoles, la mandataria reiteró que en zonas como las colonias Condesa o Roma se dio este fenómeno debido a que “muchos comercios y restaurantes atrajeron a mucha gente a visitar la zona, y después personas llegaron a vivir de otro nivel económico fueron encareciendo las rentas”.
La mandataria insistió en su rechazo a los actos de discriminación y xenofobia durante la pasada manifestación, y aclaró que este fenómeno no necesariamente se asocia con personas extranjeras que llegan a vivir a ciertas zonas de la ciudad.
Apuntó que en tal protesta “por más legítima que sea la demanda de la gente que vive en los lugares, no se puede aceptar la violencia, ni los discursos de odio; eso no es México, y más la CDMX que vive y ha vivido de la migración (…) de todo el país”.
Finalmente, Sheinbaum garantizó que su gobierno impulsa programas sociales que garantizan la vivienda, así como el acceso a todos los beneficios de la ciudad, sin ser expulsados a las periferias y marcar diferencias sociales: “Podemos apoyar a todos los estados y municipios para garantizar el derecho a la vivienda”.
Camila Doroteo