En el marco de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, la doctora Ana Luisa Guerrero presentó su nuevo libro Gatopardismo en la ONU para las políticas de desarrollo, en el que expone los problemas con los programas de la Organización de las Naciones Unidas, y cómo estos sirven para perpetuar las estructuras de dominación en el tercer mundo.
En la conferencia estuvo estuvieron presentes el profesor Arturo Vilchis Cedillo y la doctora Esther Rivera García, quienes expresaron sus opiniones sobre el trabajo y la importancia que tiene el analizar a detalle las acciones de la ONU.
Vilchis explicó que el gatopardismo busca que todo cambie para que todo siga igual, haciendo referencia a que los programas impulsados por el organismo internacional sirven para que no se tenga que cambiar a profundidad la estructura económica de los estados.
Además, explicó que la portada del libro es una casa en llamas debido a que “por dentro de los países” no existe una política propia de desarrollo, lo cual ha ocasionado que sea dictada por la ONU que, a su vez, obedece intereses ajenos al desarrollo y la cooperación de los pueblos.
En el libro se explica que desde hace 40 años las agendas de la ONU son influenciadas también por las empresas trasnacionales, las cuales influenciaron la idea de que deben crearse objetivos globales en vez de locales, lo cual hizo a un lado las preocupaciones de los ciudadanos de los países del tercer mundo y los obliga a seguir con lo dictado por los más desarrollados. Es entonces que se vuelve necesaria la aparición de proyectos alternativos.

Por su parte, Rivera explica que, a diferencia de la visión “glorificadora” que busca mostrar este organismo, la realidad es que sus políticas de desarrollo sirven como un medio de dominación, pues no se trata de una institución “apolítica” que busca el desarrollo de todos los pueblos, sino que obedece a los intereses de las multinacionales que obligan a implementar políticas que los favorezcan y que se escudan en los objetivos de la ONU para cumplirlos.
Un ejemplo de ello son las medidas de protección del medio ambiente en nuestro país, las cuales dicen que se pueden “explotar” ciertos recursos siempre y cuando ayuden al crecimiento de las comunidades, pero esa ambigüedad les permite a las empresas apoderarse de ellos bajo el pretexto de que están ayudando a cumplir con los objetivos de la ONU, beneficiando solamente a un puñado de empresarios.
Ante esto, Rivera considera que se deben dejar de pensar las políticas de desarrollo en un nivel macro para centrarse en lo local, y crear proyectos que verdaderamente favorezcan a los pueblos.
El libro fue editado por la UNAM y el Centro de Estudios Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), y ya se encuentra disponible en librerías.