Diego Ríos
El presidente Andrés Manuel López Obrador no quiso terminar su conferencia de prensa esta mañana sin antes señalar que el Ejército Mexicano no tiene tomada la Catedral Metropolitana como alertaron el periodista Pedro Ferriz de Con y el activista del FRENAAA, Gilberto Lozano.
“No es cierto que se haya tomado la Catedral por el Ejército. Esto que difundió Pedro Ferriz y otro señor del movimiento de los carros, (Gilberto) Lozano”, y pidió “no crean todo lo que dicen estos personajes que son nuestros adversarios y tienen todo el derecho de expresarse, manifestarse, criticarnos, cuestionarnos, pero por lo general mienten”, indicó el mandatario.
El Presidente enfatizo: “Esas mentiras no”, y reiteró que a pesar de que Ferriz de Con y Lozano están en su contra “eso no es ningún pecado o es ilegal, es parte de la democracia”, al tiempo que negó ser autoritario como lo buscan estigmatizar sus opositores “no somos conservadores, el conservadurismo es sinónimo de hipocresía, corrupción y autoritarismo, no somos iguales”, y refrendó el respeto de su gobierno a todas las religiones.
A un día de que se conmemore el 209 aniversario de la Independencia de México, en el primer cuadro de la capital se estableció un cerco de seguridad en las inmediaciones a la Plaza de la Constitución para evitar la aglomeración de personas, y en consecuencia, contagios de Covid-19, razón por la que negocios y oficinas se mantendrán cerrados hasta el próximo 17 de septiembre.
A pesar de que este cierre fue anunciado por las autoridades de la Ciudad de México desde el pasado sábado 5 de septiembre, faltaban 10 minutos para las 13 horas de ayer domingo cuando en la cuenta de Twitter de la Arquidiócesis Primada de México se publicó una foto de los campanarios de la Catedral Metropolitana sobre un fondo negro que se lamentaba porque los servicios religiosos de dicho templo no estarían abiertos al público debido a la presencia del Ejercito México en sus inmediaciones.
«Con mucha pena informamos a los fieles que el día de hoy y, probablemente, los cercanos al Día de la Independencia no podrán ingresar a esta Catedral para participar de los servicios religiosos ya que sus inmediaciones han sido tomadas por miembros del Ejército. Como lamentablemente no fuimos informados y aún no sabemos cuántos y qué días permanecerá esta situación ofrecemos una disculpa y les pedimos paciencia en tanto podamos volver a abrir».
Este mensaje avivó las baterías en dos de los más evidentes opositores del gobierno federal en la actual administración: Pedro Ferriz de Con, que sistemáticamente utiliza todos los medios de comunicación a su alcance para demeritar y criticar cualquier política pública del presidente López Obrador, e incluso mofarse de su persona.
Y Gilberto Lozano, líder y vocero del movimiento opositor llamado FRENAAA que ha tildado al jefe del Ejecutivo de “Masón” y que encabeza marchas de autos en las principales ciudades del país donde ciudadanos pegan cartulinas a sus vehículos con leyendas que exigen la renuncia del presidente López Obrador, al estilo de las consignas que se presentan en las avenidas de España y Argentina. Ambos países con gobiernos de ideología progresista.
El presidente López Obrador refrendó que en las próximas elecciones estará a disposición de toda la ciudadanía la revocación del mandato, y es ahí donde se definirá con absoluta libertad popular la continuación de su gobierno.
Ayer por la noche, el Arzobispo Primado de México, Carlos Aguiar Retes, publicó también por Twitter un desmentido a que la Catedral Metropolitana estuviera tomada, aunque aseguró que faltó comunicación por parte de las autoridades.
No obstante la aclaración de la máxima autoridad de la Iglesia Católica en nuestro país, Pedro Ferriz Hijar, retoño de Ferriz de Con, dijo que tras varias negociaciones se liberó la Catedral Metropolitana, y tachó de mentiroso al Presidente. A diferencia del impulso que diversas cuentas con identidad poco fiable le dieron a los tuits de Gilberto Lozano y Ferriz de Con, el post de Ferriz Hijar despertó la burla y el rechazo de la comunidad en Twitter.
“Viene la revocación del mandato, ahí de manera pacífica los ciudadanos van a decir: ‘Queremos siga el presidente o queremos que renuncie el presidente’, y se resuelve de manera responsable, serena, sin estridencias, eso es todo. Imagínense, una institución como el Ejército difamada. ‘El Ejército toma la Catedral’, está un poco exagerado, eso sí calienta”, expresó el Presidente.
