En conjunto con organizaciones filantrópicas y de la sociedad civil, la Alcaldía Álvaro Obregón reinauguró la “Cancha Salvatierra”, en Olivar de los Padres.
Se trata de un esfuerzo en el que participó Comex, a través de su programa de impacto social “México Bien Hecho”, en alianza con Blue Women Pink Men, el Club América y Fútbol Club Barcelona, ambos femenil, con la participación de la Alcaldía y su programa de fortalecimiento del tejido social y el desarrollo comunitario a través del deporte.
El proyecto beneficiará a más de 2,600 personas, que hoy cuentan con un espacio renovado. Gracias al compromiso de los voluntarios y a 456 litros de color que dieron nueva vida a 450 metros cuadrados la “Cancha Salvatierra” se convierte en un punto de encuentro donde jóvenes, familias y amigos encontrarán inspiración para construir nuevas historias en comunidad.
“Sabemos que cada balón que ruede en esta cancha, cada juego compartido y cada encuentro deportivo será también una semilla de convivencia y unión comunitaria. Nuestro compromiso es seguir generando más espacios como este, donde la energía y la creatividad de nuestra juventud sean el motor para transformar realidades”, afirmó Maritza Ordaz, directora de Desarrollo Social de la Alcaldía Álvaro Obregón Obregón.
Para Mai Hernández, Directora de Asuntos Públicos e Impacto Social de Comex, las acciones parten de una visión de impacto positivo en la sociedad.
“En Comex estamos comprometidos con contribuir al desarrollo comunitario a través del deporte y la recuperación de espacios públicos. La rehabilitación de este espacio se llevó a cabo con la robusta metodología de nuestro programa de impacto social, poniendo a la comunidad al centro y con el claro objetivo de promover el sentido de pertenencia, la identidad colectiva y la participación de los ciudadanos como agentes de cambio” comentó.
Para Paola “La Wera” Kuri, cofundadora de Blue Women Pink Men, uno de sus principales motores es impulsar el deporte entre niñs y adolescentes, para que sea parte de su desarrollo integral.
“El motor detrás de este trabajo en equipo es recuperar espacios que inspiren a las nuevas generaciones de niñas futbolistas. Queremos celebrar, enaltecer, la fuerza del futbol femenil y tener lugares donde las niñas crezcan sabiendo que todo es posible. Este proyecto es la prueba de que el deporte, el arte y la comunidad pueden transformar vidas y dejar un legado de igualdad”, mencionó.
En este sentido, la colaboración entre los ciudadanos, iniciativa privada, aliados y el sector público sigue impactando positivamente en las comunidades.
Durante el evento se llevó a cabo una actividad de integración y convivencia entre niñas de la comunidad y jugadoras invitadas tanto del Club América como del Barcelona Femenil.
