Organizaciones civiles respaldaron la propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum de aplicar un impuesto a las bebidas azucaradas, incluyendo las que contienen cualquier tipo de edulcorante no calórico, como parte del Paquete Económico 2026.
Se trata de las agrupaciones El Poder del Consumidor, Salud Justa MX, Programa de Justicia Fiscal, Fundar y la Alianza por la Salud Alimentaria, que propusieron al Congreso de la Unión aumentar el impuesto a siete pesos por litro, en el caso de las bebidas azucaradas, mientras que sugirieron un incremento de hasta tres pesos por cada cigarro.
Lo anterior con el objetivo de reducir las enfermedades provocadas por ambos productos. Además, las organizaciones consideraron que el paquete viene incompleto porque faltaron impuestos al alcohol.
“Felicitamos al gobierno federal por proponer este impuesto, pero estamos solicitando al Poder Legislativo respaldarlo e incrementarlo a siete pesos por litro. Las corporaciones se están llevando enormes ganancias de nuestro país y están dejando en nuestro país enfermedad y muerte”, señaló el director de El Poder del consumidor, Alejandro Calvillo.
Actualmente, el impuesto a las bebidas azucaradas es de 1.64 pesos por litro, no obstante, en el Paquete Económico que presentó la Secretaría de Hacienda es de 3.08 pesos por litro.
Las propuestas de la sociedad civil permitirían que México llegue al objetivo propuesto por la Organización Mundial de la Salud (OMS) de llegar al menos al 50% de impuestos en 2035.
“La propuesta es valiente, pero insuficiente. Necesitamos que el Congreso ajuste los impuestos y los aumente a tres pesos por cigarro. Si se hace, sin lugar a duda tendríamos un impacto a la salud pública y probablemente llegaríamos a prevalencias de un solo dígito, cuando actualmente hay 17% de mexicanas y mexicanos que siguen consumiendo productos de tabaco”, indicó el director de Salud Justa MX, Erick Antonio Ochoa.
Las estimaciones prevén que tales impuestos reducirán hasta en un 27% las ventas de las bebidas azucaradas y, en su lugar, se tendría una recaudación de 100 mil millones de pesos.
“Puede ser asumida como una meta progresiva y necesaria para maximizar el impacto en la salud pública ya que, dicho aumento, desincentivarían el consumo de estos productos nocivos, generando al mismo tiempo recursos adicionales que podrían destinarse a programas de prevención y tratamiento de enfermedades, relacionadas con el consumo de estos productos”, aseveró el integrante de Fundar Iván Benumea.
Abraham Pensamiento
