El cáncer cervicouterino es prevenible en un 99.7% y altamente curable si se diagnostica en etapas tempranas; sin embargo, aún faltan más de 15 años para que pueda verse controlado entre la población mexicana, advirtió Lucely Cetina Pérez, especialista del Instituto Nacional de Cancerología.
La fundadora y responsable del Programa Integral para la atención del Cáncer Cervicouterino Localmente Avanzado y Metastásico explicó que en México, 80% de casos de cáncer cervicouterino se atiende en etapas avanzadas, además de que es el segundo tipo de cáncer más frecuente en mujeres en edad reproductiva, por lo que provoca la muerte, en promedio, de 28 mujeres al día.
“Urgen estrategias de reducción de inequidad y abordajes de salud para la población en condiciones de vulnerabilidad. Es necesario realizar e invertir en un plan de trabajo, en normas de salud, guías actualizadas que realmente se lleven a cabo, pero sobre todo urgen estrategias de prevención primaria: la vacunación y la difusión entre la población”, abundó Cetina, quien también es investigadora en Ciencias Médicas y especialista en Oncología Médica.
Y es que el cáncer cervicouterino es la cuarta causa de decesos a nivel mundial, afecta sobre todo a mujeres vulnerables por su condición de pobreza y desigualdad social, ya que el tratamiento representa un costo de entre seis y 12 millones de pesos por cada mujer en etapas avanzadas.
Los factores de riesgo siguen siendo el tabaquismo, el uso prolongado de anticonceptivos, el inicio de vida sexual a temprana edad y tener relaciones sexuales con múltiples parejas, además de representar un tabú por su asociación con el Virus del Papiloma Humano (VPH) en un 99%.
La doctora Lucely Cetina participó en el coloquio Mission Early, organizado por la iniciativa All.Can México y que se llevó a cabo en la Facultad de Medicina de la UNAM. El encuentro Mission Early reunió a líderes, especialistas y actores clave del sector salud para reflexionar sobre los retos y oportunidades en la detección temprana y el acceso a tratamientos innovadores, a fin de impulsar acciones en favor de miles de mujeres.
All.Can México, a través de Funsalud, pretende una interconexión entre investigadores, pacientes y actores participantes, creando un ecosistema que conecte con actores clave para fomentar el intercambio de datos y mejorar la investigación en México.
Según datos oficiales, México destina apenas 0.35% del PIB en proyectos de investigación y solo 1.1% de las publicaciones científicas tienen origen en México.