● Sarcopenia, obesidad, desnutrición, síndrome de fragilidad y trastornos gastrointestinales son algunos padecimientos que pueden prevenirse con una dieta saludable
● Los alimentos más dañinos para las personas de la tercera edad son los procesados, porque son altos en grasas, azúcares, sales y otras sustancias dañinas
● En el Día Nacional del Adulto Mayor, el IMSS recomienda acudir con especialistas para adaptar la alimentación con base en peso, talla y estado de salud
Una alimentación saludable y balanceada permite a los adultos mayores prevenir enfermedades como sarcopenia, obesidad, desnutrición, síndrome de fragilidad y trastornos gastrointestinales, a las que están expuestos debido a los cambios en el metabolismo que se dan a partir de los 60 años, afirmaron especialistas en nutrición del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
En el marco del Día Nacional de la Persona Adulta Mayor, que se conmemora este 28 de agosto, Mónica Miranda Mendiola, nutrióloga clínica del Hospital General Regional (HGR) No. 1 “Dr. Carlos Mac Gregor Sánchez Navarro”, del IMSS, señaló que los alimentos más dañinos para este sector de la población son los procesados, embutidos, enlatados, comida rápida, botanas, dulces o galletas, bebidas azucaradas, entre otros, porque contienen altas cantidades de grasas, azúcares y sales.
“Es muy común que los adultos mayores desayunen o cenen solamente café y pan o café y galletas, esto puede considerarse como un signo de alarma al que debemos prestar atención porque ya no está cubriendo sus requerimientos de proteínas, de vitaminas, de lípidos, de fibra”, alertó la especialista.
Indicó que la ingesta en estas personas debe incluir alimentos como carnes magras, pescado, lácteos descremados y derivados, cereales integrales y una dieta alta en fibra, ya que tienden a presentar estreñimiento; también, se debe considerar que las preparaciones sean altas en Vitamina D, Zinc y Calcio.
Miranda Mendiola señaló que el consumo de botanas en ellos no está prohibido, pero debe consistir en alimentos saludables; por ejemplo, pueden comer jícama y zanahoria picada, verduras, pepino, nueces y almendras.
Indicó que en el caso de adultos mayores con obesidad debe elaborarse un plan de alimentación balanceado, mas no restrictivo “porque en esta etapa lo que se pierde con dietas restrictivas es masa muscular y no masa grasa, por lo que es importante alimentarse de forma correcta para evitar la presencia de sarcopenia y mantener un peso saludable”.
Respecto al uso de suplementos alimenticios, Miranda Mendiola señaló que en el adulto mayor solo son recomendables si éste no tiene una dieta balanceada y no está consumiendo sus requerimientos, sobre todo en pacientes hospitalizados que tienen otras alteraciones y no pueden comer o su sistema digestivo no lo permite.
“Cuidar su alimentación los lleva a un estilo de vida saludable, también es recomendable que realicen ejercicio, que tengan rutinas de ejercicio y que tengan un ambiente familiar sano”, comentó.
Por su parte, Nadia Rocío Jiménez Montero, jefa del departamento de Nutrición del HGR No. 1, resaltó que si se cubren nutrimentos como proteínas o algunas vitaminas que son necesarias en esta edad, se va a disminuir el riesgo de enfermedades.
Dijo que para mantener el estado de salud óptimo de los adultos mayores es necesario que acudan con especialistas en nutrición o dietistas para adaptar sus hábitos y costumbres a sus necesidades de una forma saludable y tomando en cuenta factores como peso, su talla y estado de salud.
A los adultos mayores que tienen problemas de masticación se les debe adaptar la dieta en cuestión a su consistencia, la cual puede consistir en papilla, alimentos picados finos y suaves.
Actualmente, el IMSS promueve la sana alimentación en la población derechohabiente a través de programas como PrevenIMSS+ y la difusión de carteles informativos en hospitales y Clínicas de Salud en los que se proporciona un código QR para descargar dietas o sugerencias de alimentos saludables.