Más de 30 años de espera, la imagen religiosa será recibida en el barrio de San Antonio.
Como es tradición cada 2 de febrero, se llevó a cabo el cambio de mayordomía del Niñopa en Xochimilco, cuyos referentes históricos datan de más de 400 años de antigüedad. Sin embargo el año pasado, por el tema de la pandemia, está celebración se vio afectada. Este año los feligreses la retomaron con estrictas medidas sanitarias.
En medio del protocolo sanitario, se llevó a cabo la ceremonia presidida por el obispo de la Diósecis de Xochimilco, Andrés Vargas Peña, quien en un ambiente festivo para la comunidad católica, encabezó la entrega de la imagen a la familia Rubí Olivares que tuvo que esperar 37 años para poder ser mayordomos.
Gerardo Rubí Olivares, nuevo mayordomo, expresó que “la pandemia nos obliga a replantear la fe, a basarnos en la caridad, la humanidad y dejar de lado lo material».
A partir de hoy y hasta 2 de febrero del 2023, esta familia será la encargada de custodiar al Niñopa, al que según la creencia popular se le atribuyen múltiples milagros.

Como testigos, al acto asistieron las familias que serán posaderas, futuros mayordomos y el pueblo en general, que como es una tradición, acudieron a la Catedral de Xochimilco con imágenes de las distintas advocaciones del Niño Jesús.